miércoles, 24 de febrero de 2010

Yo, Yo, y un poco mas de Yo por favor, o como se rompen las redes sociales

Me gustaría, si mi compañero Inmanuel me lo permite, hacer un apunte sobre una cuestión, que me, digamos, turba ultimamente. Hablemos del individualismo. Hablemos por un momento del individualismo, y partamos de sus origenes en el siglo XX (evidentemente es anterior, pero me quiero centrar un momento en la 2º mitad de este agitado siglo). Tras el periodo entreguerras y la propia guerra mundial (llamemoslo convencionalmente, la era de las masas), asistimos a un rearme del individuo como ente creador, planteando un redescubrimiento del yo interior, la experimentación a traves de drogas, y la liberación de este, a través de movimientos underground y del postmodernismo que rompe con el positivismo (asistimos pues a la aparición de los hipsters, los casi sadomasoquistas beatniks, el existencialismo francés, en los años 50). Aqui comienzan los bohemios, el romper con la convención (no quiero ser tu, no quiero tu sistema) y comienzan las actitudes politicas, los nuevos movimientos sociales, los hippies, el punk.

Es curioso ver, como a partir de la institucionalización (en un claro proceso de marginación institucionalización, en los 60 los hippies eran enemigos, hoy dia alabados, en los 70 los punks violentos yonkies, hoy dia sus botas cuestan media cuota de la hipoteca), y de la vulgaruzación de la idea, se ha pasado a una autentica destrucción de las redes sociales de solidaridad, relativamente tradicionales. Las asociaciones de vecinos son clubs de jubilados, perdiendo el caracter sociocombativo de los 70. La solidaridad entre compañeros de empleo esta desapareciendo escadalosamente, entre compañeros de clase. Importa más que no me toquen el bajovientre, antes que jodan al de al lado. Y esa ruptura de las redes de solidaridad se ve reforzada con un mundo virtual a partir de los 90. Y ya tenemos el coctel. Un poco de redes sociales alternativas, una voluntad expresa de ser el mejor por encima de todo, una prepotencia que se da al vulgarizar el concepto del yo, y tachán. Inmovilidad social. Y si alguien se mueve, lo hace desde un estupido sentido del aqui y ahora, y no se dan cuenta, que se encuadran en moda, y que dentro de ese revolucionarismo radical,hay marcas de los que quiere derribar, riendose a su espalda. Bendito individualismo... le debemos tanta paz social

jueves, 18 de febrero de 2010

El revuelo neo-con.

Los neo-con se están asustando. No se asustan porque vaya a explotar la revolución. Todos sabemos que es inviable. No se asustan porque sus ideas pierdan su lugar hegemónico. Ni se asustan porque ahora estén perdiendo dinero. Se asustan porque están viendo que sus queridísimo sistema de "librecambísmo, privatizaciones e individualismo" no funciona. Y no es que no funcione porque genere un desequilibrio en el reparto de los recursos, que aún siendo inmoral no es fundamental para el fallo del mismo, ni porque construyan toda su ideología en torno a los números, y por tanto se pase de individualismo al "cifrísmo". No funciona porque los paradigmas aclamados por la tribuna mundial y voceados por el FMI se han demostrado disfuncionales, propensos a la crisis y en última instancia perniciosos.
Y como están asustados, sus profetas salen a sus tribunas a recordar con nostalgia a Thatcher y a Reagan (seguro que incluso alguno rememora a Mcarthy y se le cae una lagrima) y hablan de los males de la colectivización de los trabajadores, de las bondades de las privatizaciones, de la maravillosa carrera del talento y de como la riqueza se crea y no se hereda. Y en una suerte de "Neo-Chamberlainismo" le dan otra vuelta de tuerca más la Selección Natural, y se posicionan del lado del poderoso, del rico, del "ente privado".
Si las soluciones para la crisis del sistema es recordar a los paradigmas del mismo que causaron la misma, para en un alarde de genialidad, recorrer otra vez el mismo camino que acaba con los bancos ganando dinero, los trabajadores aplastados y los ricos de compras por Montecarlo, significa que no es que se equivocaran y nos vendieran soluciones que ellos consideraran mejores para todos, sino que realmente son unos hijos de puta.
Y ojito, que esta gente es la que sigue dirigiendo los hilos, son el Nouveau Ancien Régime y curiosamente pecan de lo mismo: no quieren que se les supriman sus privilegios, no quieren asumir las responsabilidades y por supuesto no quieren que el tercer estado (o el quinto, ya me he perdido en el nivel de degradación al que nos han sometido) les toque las narices.
Que ellos lloren por Reagan, nosotros procuremos construir nuevas ideas.
Es increíble como el poder se empeña en empapar de colonia rancia a las momias que lo conforman.

martes, 16 de febrero de 2010

Sobre el insulto facil y el show business o como vulgarizar la política

Vergüenza. Eso debería darnos al ver a esa serie de personajillos, que en un espectáculo circense situado en una carpa hemicircular, lanzan algarabías, se mueven critican y casi bailan en unos movimientos estudiados para llegar al máximo de personas posible. Estamos asistiendo poco a poco a un proceso de vulgarización total de lo que llamamos clase política. El famoso “Hijo de puta” de la no tan tonta Esperanza Aguirre nos muestra una vez más, una serie de cosa que ya sabiamos. Primeramente de las rupturas y fracturas de la derecha española, que se muestran en forma de insultos y puñaladas en la espalda entre compañeros, y del alto nivel intelectual en el que se encuentran los debates y las intervenciones de nuestros amigos los del circo.

Y es que es un circo. Primeramente asistimos a baños de masas mientras los payasos y malabaristas hacen su actuación, después vemos como nos iluminan con focos hasta dejarnos ciegos, y musica instrumental que nos agrada al oido, en un claro derroche de recursos del director de pista, mientras como una turba de lobotomizados, asombrados por el despliegue de medios, aplaudimos, con los ojos todavía turbados.

Y ese es el problema. El recurso continuo al insulto, a la mentira, a la acusación de la mentira ajena, ocultando vilmente la propia, y la presunción de culpabilidad que se muestran los unos a los otros. Añadiendo la voluntad expresa de vender un producto, entrando en dinamicas de competencia mercantil, con grandes campañas, grandes asesores de imagen, y grandes apoyos de lobbies económicos (si señores, aceptemos de una vez que las grandes figuras políticas nacionales no son más que titeres manejados por grupos de presión), nos encontramos ante una situación desesperanzadora. Una política vulgar, y no por ser cercana a la mayoría de la gente, si no por usar la mentira la difamación y la puñalada trapera para sobrevivir y mantenerse. ¿Y ante eso que respuesta hay? A mi no me importa, tengo mi coche, mi casa, y mis cubatas por la noche. Mi trabajo, ya no me importa tanto.

Acorazado Potemkin

Siguiendo la linea con la que estamos construyendo el blog , invito a un nuevo colaborador para que se disponga a compartir con nosotros sus ideas; inteligencia, dialéctica y una visión marxista de los asuntos que vaya a tratar, configuran a nuestro nuevo invitado.
Yo le espero con ganas. Para discutir, para asentir con la cabeza y sobre todo para desarrollar una linea de pensamiento conjunto, a veces convergente, a veces divergente.
Bienvenido Broz!

domingo, 14 de febrero de 2010

Absolutismo de exportación

Partamos de la premisa de que el modelo occidental de entender la vida, es decir, tu modelo, mi modelo, nuestro modelo, es el mejor de todos. Basemonos en el hecho de que el que sea el modelo más extendido por el mundo lo convierte en el órgano rector por antonomasia, y por tanto todo aquello que sea diferente o disfuncional respecto a él es inútil. Sobreentendamos, que, por tanto, cualquier construcción social, económica o familiar ajena a este patrón esta mal, y que como los "índices de popularidad" de las mismas se van a realizar mediante métodos derivados del modelo único, éstas serán por tanto ineficaces.
Esto que describo es la punta de lanza de muchísimos argumentos que sitúan al europeo, y sus ramificaciones transoceánicas como "hombre avanzado" y al resto de poblaciones y culturas como "indígenas pendientes de civilizar".
Este modelo no es nuevo; lo esgrimieron los europeos en el siglo XV al comenzar la colonización de América y lo esgrimieron en el XIX cuando comenzaron la colonización de África/Asia. Y nos lo repiten ahora, cuando por activa y por pasiva se intenta exportar el modelo hacia países que no lo han elegido voluntariamente. Y lo exportamos en forma de ONG, en forma de filial de las multinacionales y en forma de desprecio, que se hace patente cuando una serie de iluminados de la ciencia occidental, salen a la palestra a demostrar mediante elementos de tan dudosa calidad como el CI, la superioridad intelectual de "nosotros sobre ellos".
Hoy quiero hacer una pequeña reflexión sobre esto. El desarrollo subordinado del capitalismo en los países supuestamente habitados por seres inferiores ha traído una serie de desajustes sociales en su seno que en muchos casos ha imposibilitado el desarrollo de infraestructuras necesarias para la expansión cultural. Por otro lado, su desarrollo humano se ha establecido por lineas diferentes al nuestro, y su capacidad creativa responde a otros cánones. Así pues la conjunción de "imposición sobre diferencia" ha convertido a muchas de estas zonas en una suerte de ensalada conceptual que ha acabado con la degeneración y la tendencia a la depredación de los aristócratas locales. Creo que occidente debe empezar a plantearse si es realmente el faro cultural del mundo o si simplemente se ha convertido en un enorme gremio de mercaderes avariciosos que pretende vender por absolutas las reglas del juego que le enriquecen. Y en el camino se da el lujo de defenestrar cualquier construcción diferente a las normas que ellos establecen para todos.
Absolutismo moral, de exportación y excluyente.
Si esto es evolución, paren el mundo que me quiero bajar.

miércoles, 3 de febrero de 2010

Perdonen que no me levante.

Los exámenes han drenado mi ración de espacio-tiempo. Es un realidad que más de uno puede contrastar, por lo que no es casual que haya dejado este espacio abandonado. Eso no significa que la persiana haya bajado, sino simplemente que cuando termine con mi periplo académico, volveré a contar esas historias, que algunos parecen interesar.
En breve de vuelta, damas y caballeros.